miércoles, 16 de junio de 2010

Preludio

Adiós.

No me gusta ese término para definir la situación.

A-Dios, pero... ¿El qué?

En realidad no le debo nada.

El término específico es

A-Vosotros.

Responsables de la arena entre los dedos,

de las páginas escritas.

Permanentes.

Solidarios con nuestros preludios.


Avosotros.





Transición, tierra de nadie. Por fin seré yo quien decida sobre ella y no un deber prefijado y de puntillas para ver que hay delante. Bien. ¡Bien!


PD: Tampoco sé cuanto durará esta transición, así que espero aprovecharla.

Hay que inventar tiempo.



miércoles, 9 de junio de 2010

Jazz

Pese a todo, hay cosas. Cosas y cosas. Hay cosas que van y van y van, una tras otra, otra y otra. Que suben y suben y suben y bajan porque se han dejado algo. Cuando veo que esas cosas son notas, y que se mezclan con mi aire y gusto y me tocan y las veo, mis sentidos se hacen uno con el tiempo y el espacio, produciendo vibraciones por todo mi cuerpo, que acarician poros y excitan mente. Van y vienen, y van y van. Y lo reitero. Ya no es llanto lo que escucho, sino poder, grandeza, tras la tormenta pasada. Jugar con el viento y jugar con las cuerdas, para hacer lazos y nudos entre todo. Desde mis pies hasta mi cabeza, pasando por mi alma que no se donde está pero que se asoma para sentir un poco, el surco avanza. Jazz.



Fíjate, esto es de las cosas que tenía arrugadas en el cajón. Cuando echo la vista atrás... snif snif.


Tiempo inexistente, pero ya nos inventaremos alguno.